martes, 11 de diciembre de 2012

CAPÍTULO 101: NIÑOS PEQUEÑOS

*NARRA TAYLOR*

Estaba bien allí, no dejábamos de reírnos y hacer las tonterías de siempre, pero mi vista no se apartaba de Harry, y mis pensamientos no dejaban de repetir su nombre. Nunca me había pasado eso, creo.
Vi que Niall estaba sentado un poco más allá, me acerqué a él y guardó su móvil.

-¡Hola pequeño!-Le dije sonriente.
-Hola Tay. ¿Qué tal?
-Genial, ¿y tú?
-Bue....Bien, bien-Su respuesta no me sonó muy convincente.
-¿Seguro? Hace más de diez minutos que no te escucho reírte.-Sonrió.-Vale, pero esa sonrisa no me sirve. ¿Qué te pasa?
-No quiero amargarte con mis problemas.
-No me vas a amargar.
-De verdad, que no es nada.
-No te creo.
-Haces bien.
-¿Ves? Porfi porfi porfi -Le dije varias veces con cara de niña buena.
-Es una tontería.
-No, porque tú, con las tonterías te ríes.
-¿Por qué me conoces tan bien?
-Porque te quiero, eres mi amigo y a los amigos se les entiende con una sola mirada.-Me abrazó.
-Muchas gracias Tay, pero de verdad, que es una estupidez.
-¿Sabes? Una de mis aficiones es escuchar estupideces... ¿Me cuentas alguna?-Empezó a reírse.
-¿Hacemos una cosa?-Me preguntó con media sonrisilla.
-Te escucho.
-Vas para allá con los demás, y yo voy en cinco minutos, y dentro de un rato, te cuento lo que pasa ¿va?
-Me parece bien.... Pero me lo tienes que contar ¿eh?
-Por supuesto.-Me levanté y me fui hacia donde estaban los demás. Me giré y le guiñé el ojo a Niall.

Darcy nos contó eso de que se quería sacar el carnet de moto y comprarse una Vespa. Darcy no se paraba ante nada ni nadie, si algo se le metía en la cabeza, no paraba hasta conseguirlo.
Harry estaba hablando con Liam, me acerqué a él por detrás y rodeé su cintura con mis brazos, y apoyé mi cabeza en su hombro.

-¡Buuh!-Le dije sonriente.
-Hola enana...-Me dijo.
-¿Enana yo?
-Pareces una niña pequeña.
-¿Eso es bueno?
-No se, a mí me encanta cuanto haces esas cosas.
-Vale, pues seré tu niña pequeña.-Le dije destacando el ''tu''.
-Harry, tú también pareces un niño pequeño.-Le dijo Liam.
-Puede ser mi niño pequeño.-Le dije.
-Me parece una buena idea.-Dijo Harry. Le saqué la lengua.
-Claro, que los niños pequeños no pueden cuidar de los demás, así que me buscaré a alguien que me cuide.-Le dije separándome de él y acercándome a Liam.-Empezamos los tres a reírnos.
-¡Harry!-Gritó Louis. Nos giramos.-¡Mira lo que he encontrado!-Nos dijo enseñando tres Nintendo DS. ¿De dónde había sacado eso?
-¡Ya vooooy!-Le respondió muy emocionado Harry y e fue corriendo.
-Él es más pequeño que yo.-Le dije a Liam.
-Sí, creo que sí.

Aproveché ese momento para ir a hablar con Niall. Me senté a su lado.

-Hola de nuevo. ¿Me lo vas a contar ya?-Le dije.
-Sólo si prometes no burlarte de mí.
-Nunca he hecho eso y jamás lo haré.
-Gracias.
-No las tienes que dar.
-A ver, hace ya bastantes días, había quedado con Zayn y Darcy, pero de camino, pues me encontré a una señora, que me dijo que su hija era muy fan nuestra, entonces, decidí llamar a su hija, y la mujer se quedó bastante sorprendida.
-Oh... eso es muy bonito por tu parte.
-Gracias. Al final, como Maddi, la chica de la que te hablo estaba cerca, vino hasta donde estábamos su madre y yo. Estaba realmente emocionada, no sabía si reír o llorar, así que me abrazó, y me dijo que no se lo creía.
-Normal, yo casi no me creo que esté ahora mismo aquí.-Sonreí.
-Pero luego, me dijo que había soñado muchas veces con conocerme, y que había ensayado todas las cosas que me quería decir, pero que ahora no se acordaba. Y la verdad, yo no me quería quedar con la duda, así que le pregunté. Y ella me dijo que seguía sin recordarlo, pero que todo se resumía a que me daba las gracias por todo, por haber cambiado su vida, que la había ayudado mucho.-Niall me estaba contando eso y estaba nervioso. Era muy lindo, no pude hacer otra cosa que abrazarle. De momento, no encontraba nada malo en aquella historia.
-¿Y eso es lo que te pone triste? ¿Hay algo más?
-Sí, hay algo más. Le pregunté a Maddi ¿por qué yo era tan importante? ¿Qué había hecho para ayudarla tanto?
-¿Y qué te respondió?
-Nada.
-¿Nada?-Ahora me había perdido yo.
-Sí. Sólo miró a su madre, me volvió a mirar y sonrió. Entonces, yo entendí que no se sentía cómoda contándome lo que fuera, delante de su madre.
-¿Y aún sigues queriendo saber eso?
-Sí, cada segundo que pasa, recuerdo las palabra de Maddi, y luego recuerdo en que tenía los ojos de lágrimas. ¿Qué le pasaría?
-¿Por qué no la llamas?
-¿Debo hacerlo?-Agachó la cabeza.
-¡Claro! Es lo mejor que puedes hacer. Además... ¿Qué es lo peor que puede pasar?
-No se... Cada día miro mil veces el móvil, por si me ha llamado, o mandado un mensaje a WhatsApp, pero no hay nada. ¿Por qué crees que es?-Se le veía preocupado.
-Porque ella es tu fan, y no dudo en que te ame más que a nada, pero quizás piense que si te llama o manda un mensaje, te va a molestar, o creerás que se aprovecha de tener tu número. Creo que si la llamas tú, será muy feliz.
-Aunque no lo creas, estas cosas me ponen nervioso. ¿Y si ya se ha olvidado?
-Eso no se olvida, te lo aseguro.
-¿Me deseas suerte?
-¡Te deseo muuuuucha suerte!


Niall sacó su móvil del bolsillo y buscó el número de Maddi. Me levanté y vi a Paola, Darcy y Lola riéndose. No dejaban de reírse, bueno, Zayn también se estaba riendo. ¿Qué pasaría?

-¿Por qué tantas risas?-Pregunté.-Vale. No hace falta que me respondáis todos a la vez.
-Perdona Tay. Mira a lo que están jugando Liam, Louis y Harry.-Me dijo Darcy y entonces, les miré. Estaban tumbados en el césped, con las Nintendo DS.
-¿Esas Nintendo son nuestras?-Le pregunté.
-Sí.
-¿Y qué juego están usando?-Pregunté. Recuerdo que cogimos las Nintendo por si nos aburríamos en el viaje y nos queríamos relajar.Pues vaya... ninguno me contestaba, así que me acerqué a Louis, Liam y Harry. Me senté en el suelo.

-¿A qué jugáis?-Les pregunté.
-¿Sabías que tu perro se estaba muriendo de hambre?-Me preguntó Louis. Entonces, me acerqué a la pantalla y vi que estaba jugando a cuidar a los perritos. Estaba graciosa la escena, verles a ellos, allí, tan emocionados jugando a ese juego.
-¿Sí? Oh... pobre.-Fingí lástima.- A todo esto... ¿qué perro es el que casi se muere?
-El Beagle, ese que se llama Cat.-Me miró y se rió.-Es un poco absurdo que tu perro se llame gato.
-Tiene una explicación.-Le dije.
-¿Tienes algo en contra de los gatos?-Le preguntó Harry.
-No, nada en contra... ¿Cuál es la explicación?
-La culpa es de Harry.-Le dije.
-¿Mía?-Preguntó.
-¿Suya?-Preguntaron Louis y Liam a la vez.
-Sí. A ver, cuando me compré ese juego y creé ese perro, pues no dejaba de pensara en Harry.
-Ejem como ahora ejem-Dijo Darcy por detrás. Sonreí, y los demás se rieron.
-Y entonces, con la tontería de los gatos, pues le puse gato.
-¡Qué way! Un perro tiene un nombre en honor a mí.-Bromeó Harry.
-Pero me cansé del juego... es que me aburre, a mí me gustan los perros de verdad, para poderles acariciar y todo eso...-Dije con voz de buena persona.
-Yo también quiero uno.-Dijo Harry.
-¿Por qué no te lo compras? Así yo podría cuidarlo.-Le dije.
-¿Y por qué no te lo compras tú?
-¿Y por qué no me lo compras tú?-Eran absurdas nuestras conversaciones, pero me encantaba.


*CONTINUARÁ...........*

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