Muchas gracias por leer y muuuchoooos besitoos :)
El abrazo se terminó. Pero no me sentía mal porque sabía que podría abrazarle muchas veces más. En pocos días, Harry se había convertido en un gran amigo.
¿Tú no tenías una cámara de fotos?-Me preguntó
Sí, ¿por qué?- Le dije.
¿La tienes aquí?- Continuó.
Sí, la tengo en el bolso.-Le respondí.
Harry se levantó. Mi bolso estaba en el coche. Supuse que iría a por la cámara.
Efectivamente. A los pocos minutos volvió. Pero.... no traía la cámara. Traía mi bolso.
Toma.-Me dijo mientras me daba el bolso.
¿Por qué no has cogido la cámara?- Le pregunté.
Porque... no quería registrarte.-Se excusó.
Lo siento, pero te he visto rebuscar.... ¿no será que no la has encontrado?- Le dije riendo.
Tal vez. No se cómo pueden caber tantas cosas en un bolso tan pequeño.- Me dijo. Me parecía muy tierno cuando me tenía que dar la razón.
Saqué la cámara.
Harry cogió la cámara. La encendió. La colocó sobre uno de los columpios. Activó el temporizador y luego se acercó de nuevo a mí al tiempo que gritaba: ''¡sonríe!''. Pero lo que él no sabía es que no hacía falta que me pidiera que sonriera.
¿Cómo ha salido?- Pregunté. Más bien, me refería a: ''seguro que salgo como un coco, pero tú haces que la foto sea perfecta''.
¡Qué sexys son mis rizos!-Exclamó. Le golpeé en el hombro.
¡Qué creído eres!-Exclamé.
No, sólo he sido sincero... tú me has preguntado, yo te he respondido.-Me dijo.
Está bien, haz otra foto. Voy a superarte.- Le dije.
Volvió a colocar la cámara. Se acercó a mí. Nos sentamos ambos en el suelo. Uno frente al otro. Con una mano me semi-recogí el pelo, luego, intenté poner cara de interesante, pero verle sonreír de esa manera me hizo sonreír. No podía evitarlo. La foto se hizo.
Esta vez, me acerqué yo primera a ver cómo había salido la foto.
¿Qué cómo de sexy salgo esta vez?- Me preguntó.
Bueno... en mi habitación hay posters en los que sales mejor.-Evidentemente, salí perfecto siempre, pero no le quería dar la razón.- Pero yo salgo tremendamente guapa ¿eh?.
Déjame comprobar lo que dices.-Dijo el con un tono que pedía revancha.
Ya verás....-Le dije dándole la cámara.
Es cierto, salgo muy guapo, pero tú me ganas.-Me dijo. Oh!! Ahora ya podía acabarse el mundo. aajajaj No, aún no, aún no se lo había contado a mis amigas.
Continuamos haciéndonos fotos. Algunas eran muy bonitas, otras eran realmente divertidas.
Una cosa.... Si tanto os gustan las fotos y pasáis tantas horas juntos... habrá muchas fotos que las fans no hemos visto ¿cierto?- Le dije.
Sí. Llevas razón. Pero en todas salgo igual de guapo.-Me respondió. Él continuaba en su mundo de rizos sexys y sonrisas maravillosas.
Es cierto...-Le di la razón. No podía hacer lo contrario.
¿Piensas que soy sexy?-Me preguntó.
Está claro... no conozco a nadie que no lo piense. Pero además.... me encanta cuando te lo dices tu mismo.-Le respondí.
¿Sí? ¿Por qué?-Quiso saber.
Porque cuando te lo dices tú mismo eres tan adorable que me dan muchas ganas de abrazarte.-Le expliqué.
¿Y por qué no lo haces?- Me dijo.
Así, que sin pensarlo dos veces. Le abracé. Creo que nunca me había alegrado tanto de dar un abrazo.
Pasado un rato, sonó el móvil de Harry.
¿Sí?-Preguntó.
Hola.-Dijo Louis desde el otro lado de la línea.
Hola ¿qué tal?-Le preguntó Harry.
Bien, estoy en casa con Paola... ¿dónde andas?- Explicó Louis.
Estoy con Taylor... ¿sabes qué? Me ha dicho que soy sexy ahahahahah-Le dijo a Louis.
Ahahahah- Rió Louis.- ¿Qué hacéis?- Preguntó.
Todo y nada.-Respondió Harry.
¿Qué respuesta es esa?- Preguntó Louis.
No se, es lo primero que he pensado.-Contestó.
Bueno... ¿y no puedes pensar algo más normal?- Dijo Louis.
Yo no.... pero quizás Taylor sí.-Respondió Harry al tiempo que me daba el móvil para que hablara yo. No sabía qué decir.
Hola.- Saludé a Louis.
Hola.-Me saludó.
Bueno... estamos aquí, sin hacer gran cosa. Estábamos comiendo chuches, aunque la verdad, me apetecería almorzar ya.- Eso último lo dije elevando la voz para que Harry me oyera.
¿Harry no te ha llevado a comer aún? Yo estoy aquí con Paola....- Hizo una pausa. De fondo oí la voz de Paola.- Quiere que te diga que se muere de ganas de enseñarte el tatuaje que se ha hecho.
¿Se ha hecho un tatuaje?- Le pregunté- ¿Cuándo? ¿Dónde?- ¿Me lo había dicho y yo no lo recordaba? Quizás... pero bueno, ya lo vería.
En la muñeca, la acompañé yo. A mí me gusta, es muy bonito.-Me explicó Louis.
Pues dile que yo también quiero que vea el mío.- Escuché cómo se lo dijo a Paola.
Bueno, dile a Harry que si no te quiere llevar a ningún sitio a comer.... que te traiga aquí a casa antes de que te mueras de hambre.-Me dijo entre bromas.
Eso espero, y si no... me subo en el coche y vuelvo yo sola a casa.-Le respondí.
La conversación duró unos minutos más. Nos despedimos. Luego le dije a Harry lo que habíamos hablado y decidimos volver a casa para comer.
¿Qué vamos a comer?- Pregunté descaradamente.
No se qué hay en la nevera.-Me respondió Harry.
Eso es muy inteligente por tu parte... espero que te salga buena la comida.-Le dije, dando así por hecho que debía cocinar para mí.
Ah... que haré yo la comida ¿no?- Me dijo.
Hombre... qué menos, después de la espera... Menos mal que Louis me ha salvado porque si no... - Le dije fingiendo victimismo.
¡Qué teatrera eres!- Exclamó- Anda, sube al coche, no vaya a ser que a la nena le de algo malo a causa del hambre.
Entre risas y miradas subimos al coche.
¿Me dejas probar?- Le pregunté.
¿El qué?- Me preguntó.
¿Qué va a ser? El coche..... Deja los malos pensamientos.- Le dije. Él comenzó a reír de una manera que me hizo pensar que estaba en lo correcto, mis palabras le habían hecho pensar mal.
No se si debo pensármelo.... -Me respondió.- ¿De qué te ries?
De la cara que has puesto... seguro que has imaginado cualquier cosa.-Le dije.
*CONTINUARÁ..... ¿LE DEJARÁ PROBAR EL COCHE?*
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