viernes, 5 de octubre de 2012

CAPÍTULO 58:''LO TENGO CASI TODO''

Hola. De nuevo, siento la tardanza, pero el instituto me roba demasiado tiempo. Bueno, aquí les dejo el capítulo 58, espero que les guste. Pueden dejar los comentarios en la parte inferior, también podéis valorarlo, y utilizar el chat. NARRA TAYLOR.


Así era, Harry estaba muy concentrado, preparado para cazar al vuelo su gominola. Él creía que podía ganarme, pero lo que no sabía es que a mí no me paraba nadie. Bueno, tal vez sí, cuando él sonreía.... uff, mi mundo se paralizaba, pero eso era normal.

Justo cuando Harry iba a atrapar su gominola... me moví, me incorporé y le empujé, haciendo con ello que cayera del columpio. Evidentemente, no era mucha altura, era más o menos lo mismo que si hubiera caído desde una silla. De lo contrario, de haber sido de un sitio desde el que se podría haber lastimado, no le habría empujado.
Cuando se notó caer, su expresión cambió. Era muy divertido. Yo comencé a reír. Luego, me acerqué a él.

¿Estás bien?- Le pregunté entre risas.

Sí, aún me quedan fuerzas para la revancha.-Me respondió sonriente, pero fingiendo una voz desafiante.
Muy bien.... veremos quién gana.-Le dije.
Seguro que gano yo.-Me dijo muy convencido.
¿Ahh sí? ¿Y cómo estás tan seguro?-Le pregunté.
Bueno... te puedo dejar fuera de juego fácilmente.-Me dijo.
¿Cóm...?-Comencé a decir, pero no pude terminar la frase, porque cuando me di cuenta... nos estábamos besando. 

No me lo podía creer. Era perfecto. Llevaba toda la razón, con eso me había dejado fuera de juego. ¿Cómo podía haber tanta perfección dentro de una sola persona? Aunque pueda resultar extraño, nunca, nadie, me había dado un beso así. Fue un beso espontáneo y divertido, pero el más hermoso y romántico a la vez. Era una mezcla de sentimientos indescriptible. ¿Y si todo eso era irreal? No, nunca los sueños eran tan perfectos. Creo que la escena vista desde fuera debía ser muy bonita:nosotros dos, en el suelo, entre los columpios, besándonos... ; pero disfrutada desde dentro era maravillosa, perfecta....


Cuando Harry me miró, yo no sabía qué expresión debía mostrar. Así que me decidí por mostrarme tal y como me sentía:FELIZ. Sí, esa era la palabra acertada, estaba feliz, quizás más que nunca.



Sonreí, volví a sonreír, y así mil veces más. Claro, que la sonrisa de Harry superaba mil veces a la mía. Su sonrisa me hacía morir de amor, derretirme de dulzura, hacía que mis ganas de volverle a abrazar, a besar, aumentaran.

Llevas a razón, me has dejado fuera de juego.-Le dije.

Pero... yo no me refería a dejarte fuera de juego con esto.-Me explicó.
¿Entonces?-Le pregunté.
¿De verdad esto te ha dejado fuera de juego?- Me preguntó.
Sí, nunca podrías haber hecho nada mejor.-Le dije, las palabras se escapaban solas de mi boca.
Eso me gusta.... -Me dijo sonriente.
Pues más me gusta a mí.-Le dije.

Los dos estallamos en una carcajada.  Me acerqué a él. Nos abrazamos. 


Has ganado.-Le dije.

Bueno.. si tú crees que he ganado... Merezco un premio ¿no?-Me preguntó.
Sí, quizás lo merezcas, pero... ¿qué premio quieres?-Le pregunté sonriente. La verdad, que si no me hubiera besado, tendría ideas en mi cabeza, pero ahora... ahora ¿qué podía decirle?
Bueno...algo que me guste... -Dijo pensativo.
¿Ves? Si hubiera ganado yo sería más fácil elegir el premio.... -Le dije juguetona.
¿Sí? ¿Por qué?-Me preguntó, aunque creo que él ya sabía la respuesta.
Sí... por ejemplo, yo premio hubiera elegido... Un beso. Pero bueno, gracias por haberme dado el premio sin haber ganado.-Le expliqué.
Entonces... ¿me dices que me quedo sin premio?-Me preguntó.
Bueno, es que no se me ocurre nada... creo que tú tienes casi de todo.-Le respondí.
¡Exacto! Casi de todo, tú lo has dicho, siempre puede faltarme algo.-Me dijo, sin borrar de su cara esa sonrisa que me hacía morir de amor.
¿Qué es lo que te falta?-Le pregunté.
Alguien que me prometa que siempre estará ahí.-Me respondió dulcemente.

Casi como en un acto reflejo, sin poderlo evitar, le abracé fuertemente. Noté cómo mi sonrisa se hacía cada vez más grande. Mi felicidad y mi confusión aumentaban casi al mismo ritmo.

Él correspondió mi abrazo. Era una sensación maravillosa. Siempre había soñado con un momento así, con abrazarle, siempre  había creído que sería perfecto, pero ahora que estaba cumpliendo mi sueño me estaba dando cuenta de que era mucho más que perfecto. No podía creer sus palabras. ¿De verdad significaban lo  que yo había entendido? Seguro era un error. No, en ese momento era feliz, no me importaba si se refería a estar siempre ahí como amiga o estar siempre ahí como su novia. Da igual, el caso era que quería que estuviera.

Ese abrazo parecía no acabar, pero al mismo tiempo parecía corto. Lo que era seguro es que era perfecto.




*LAS PALABRAS SON BONITAS, PERO... ¿SE QUEDARÁN SÓLO EN PALABRAS? EL AMOR PARECE REBOSAR POR TODOS LADOS*


No hay comentarios:

Publicar un comentario