sábado, 29 de septiembre de 2012

CAPÍTULO 19. NADA ES LO QUE PARECE


Hola, aquí les dejo el capítulo 19. No se cómo se quedaron con el capítulo anterior. Espero que les gustara, al igual que espero que les guste este. No olviden los comentarios. Sigue estado narrado por Darcy.



Salimos de la tienda, a pesar de que me seguía sintiendo mal, Harry me había hecho mejorar el ánimo. Todas aquellas personas seguían allí. A pesar de que había pasado un rato, no se habían ido. Y no lo harían hasta que no saliéramos.
Harry fue amable con todas las cámaras, e intentó responder a todas las preguntas, pero también esquivó a todas las que pudo. No negó ni confirmó nada relacionado con aquellas portadas de resvista, en las que salía yo, con Zayn, cerca de aquel maravilloso lago, en una actitud cariñosa. Pero no sólo estaba esa foto, también había una foto en la que se me ve a mí, con mi vestido transparente a causa del agua de la pasada noche, muy cerca de Harry, justo en el momento en el que se acercó para pedirme perdón.

Nos costaba avanzar entre tanta cantidad de fotógrafos, periodistas... . Yo no estaba acostumbrada a aquellas situaciones. Era la primera vez que vivía algo así, y aunque me sentía mal porque creía haberles metido en un lío, me sentía feliz porque iba de la mano de Harry, y él me iba abriendo camino entre aquella multitud de cámaras, micrófonos, personas.... Él iba sonriente, e incluso se paró con alguna fan.

Se escuchaban todo tipo de preguntas, ¿estáis saliendo? ¿la chica que va contigo es tu amiga? ¿es novia de Zayn? ¿Dónde la conocísteis? Y muchas más con menos sentido aún. Harry no respondió a ninguna de esas preguntas. Tan sólo dijo que todo lo relacionado con ese tema, lo dirían ellos.

Cuando llegamos al coche, entramos. Y aún así, los fotógrafos seguían haciendo fotos.

¿Cómo han llegado esa foto hasta esas portadas?- Le pregunté angustiada.
No te preocupes, es lo más normal.- Me respondió.
Pero no quiero que ahora os metais en un lío por mi culpa.- Le dije.
No nos vamos a meter en ningún lío, te lo aseguro. Sólo estarán unos días con esas dos fotos, luego, saldrán fotos nuevas, con tus amigas, o quizás más contigo.- Explicó.
Pero.... sólo somos amigos, ustedes habíais confiado en nosotras.- Dije.
Y seguimos confiando.- Explicó.- Sabemos que esas fotos no las hebeis vendido vosotras.
Ya.... pero quiero que os quede claro que no queremos ser vuestras amigas por vuestra fama.- Le aseguré, con gran preocupación en mi mirada.- He de darte las gracias.
¿Por qué?- Me preguntó.
Porque aún sabiendo que estaba todo ese revuelo en la puerta, has entrado de nuevo en la tienda para consolarme. Y después, has agarrao mi mano, para abrirme paso entre esa multitud de personas.- Le expliqué.
No pasa nada, no me ha costado trabajo, lo he hecho porque me ha salido así, sin más.- Comenzó a decir, con la vista fija en la carretera, aunque de vez en cuando me miraba disimuladamente, quería comprobar si seguía llorando.- Y sin duda alguna, lo volvería a hacer.

No pude evitar suspirar. En ese momento, giré mi cabeza, y orienté mi miraa hacia la ventana, de nuevo se me estaban llenado los ojos de lágrimas, aunque tenía una sonrisa en la boca. Noté cómo me miró por el espejo retrovisor. Mis ojos, aún estaban maquillados, pero el maquillaje no podía ocultar las lágrimas, al contrario, sólo sería capaz de dejar su rastro.

Al menos ahora,has sonreído, aunque tus ojos siguen llenos de lágrimas. Justo entonces, el semáforo se puso en rojo, Harry pisó el freno. Se giró hacia mí.
Por favor, tienes una mirada muy bonita, evita las lágrimas.- Me dijo.
Muchas gracias. Tú ya me has dejadoclaro que no pensarás mal de mí por las fotos que han salido de nosotros. Pero....- Hice una pausa.- Pero, me preocupa que Zayn se moleste por la foto que ha salido de él y mía cerca del lago.
¿Sabes qué?- Me preguntó.
No, dime.- Le respondí.
Si no hubiera estado a gusto en tu compañía, jamás hubiera actuado así contigo. Es una persona divertida, pero muy reservada. Si estuvo así contigo, no se arrepentirá, a menos que tú, de tu mano, le defraudes.- Hizo una pausa, al tiempo que arrancaba.- Así, que por muchas fotos que salgan, él está seguro de sus actos, y sabe demasiado bien que siempre tenemos cámaras alrededor, así que para evitar problemas podía no haberte cogido en brazos ¿no crees?.- Terminó de explicar.
¿Quieres decir que él era consciente de que podrían aparecer fotos, y que por tanto, aún siendo consciente prefirió pasar un buen rato conmigo?- Le pregunté. Las lágrimas habían desaparecido de mis rostro, y la sonrisa nerviosa había dejado paso a una sonrisa dde felicidad.
Sí, a eso me refiero.- Me dijo.

Sonreí como una niña pequeña a la que le acaban de dar una caja de colores nuevos. En ese mismo instante, Harry detuvo su coche.

¿Qué pasa?- Pregunté. Pero no obtuve respuesta, simplemente, se giró hacia mí, y me abrazó.- Aún no se han ido todos los fotógrafos.- Le avisé.
No me importa, te dije que lo haría mil veces más. Me gusta que la gente a la que quiero sea feliz, y me encanta cuando sonries.- Me dijo.- Y entiendo que te hayas sentido mal por la presión mediática, por ello, cogí tu mano, y noté que estaba temblorosa.

Harry me estaba haciendo sentir la persona más feliz del mundo. Justo entonces, olvidé todos los problemas, sentía que el mundo se había parado sólo para mí. Eran demasiadas emociones, demasiadas sonrisas, demasiadas lágrimas, demasiadas miradas.... Todo era increíble.

Condujo durante unos minutos. Durante el resto del viaje, no hablamos nada, yo me deciqué a sonreír a través de la ventana. Sentía la sensación de que todo el mundo sabía que era feliz.

Comenzó a sonar Moments, era mi tono de llamada. Taylor me estaba llamando. Descolgué.

¿Sí?- Pregunté.
¿Dónde estás loca?- Me preguntó.
Pues...- Me quedé un momento en silencio. No sabía qué decir, porque no podía desvelar nada de lo que me habían dicho los chicos.- Estoy comprando algunas cosas, no tardaré mucho. Si queréis, entrad mientras en algún bar y os tomáis algo.
Está bien, pero no tardes.- Me dijo, luego colgué.

No sabía qué excusa le pondría. Tenía que ser una bastante buena, pero.... no podríamos regresar aún a casa. Uf... me estaba perdiendo.
¿Qué hacemos?- Le pregunté a Harry.- No pueden regresar a casa hasta las diez de la noche más o menos ¿verdad?
Tengo una idea.- Dijo de pronto, mientras entrábamos en el jardín.
Dime.- Dije aún sin bajarme del coche.
No, déjalo, ya nos encargamos nosotros.- Me dijo sonriente. Ahora estaba llena de intriga.

Cuando llegamos hasta el lugar del  jardín en el que estaban Liam, Louis, Zayn y Niall, Harry les contó todo lo sucedido. Pero también les contó todo lo que lloré y todo lo que dije. Ellos, me sonrieron, y me dijeron que no me preocupara, que aunque no estuviera acostumbrada, no pasaría nada, y lo más importante: ''no ha sido por tu culpa''.

Muchas gracias chicos.- Les dije.
No tienes que agradecer nada, si decidimos estar con vosotras fue porque quisimos, y no nos importó el qué dirán.- Me dijo Zayn. En ese momento, yo estaba sentada en la valla del jardín, no pude evitar sonreír y mirar a Harry.
Bueno, chicos, mil gracias por todo, pero yo tengo que irme, he de pasar el día con Taylor y Paola, aunque no se cómo haré para tenerlo todo listo, pero que no vean nada al llegar.- Les expliqué.
Yo tengo una idea.- Dijo Harry.- Pero os la cuento luego, cuando Darcy no esté.
Bueno, me voy ya o no llegaré a tiempo.- Dije al tiempo que me disponía a salir del jardín.
Espera, danos tu número de teléfono, creo que lo necesitaremos.- Dijo Liam, justo después derecibir un codazo por parte de Harry y Zayn, creo que pensaban que no me había dado cuenta, aunque me hice un poco la despistada.
Sí, toma.-Le tendí mi BlackBerry, donde estaba apuntado mi número.
Pero...¿te vas a ir en metro? Si quieres te llevo, mientras Harry pone en marcha ''su idea''- Dijo Louis.- A saber qué ha pensado esta vez.- Y estalló en una carcajada.
Pero, ¿en serio me llevas? ¿Después de todo el revuelo?- Pregunté sorprendida.
Sí, ya te lo hemos dicho, no pasa nada. Te dejaré un poco antes de donde hayas quedado, para que Taylor y Paola no me vean ¿vale?- Me dijo.
Sí, me parece genial.- Le respondí.

Cuando llegamos, bajé del coche, le agredecí mil veces a Louis todo lo que estaban haciendo por nosotras y me fui. Estaba muy contenta, aunque, debía guardar tantas muestras de felicidad.

Ya era hora ¿dónde estabas?- Me preguntó Taylor.
Eso, ¿te has olvidado que es mi cumpleaños?- Dijo Paola.
No, no me he olvidado, sólo me he entretenido un poco por ahí, lo siento chicas.- Dije fingiendo preocupación.
¿Vamos a casa?- Preguntó Paola.
A  mí me apetece comer allí- Dije señalando un restaurante de comida Mexicana que estaba en la acera de enfrente.
¿Sí?- Me preguntó Taylor extrañada, pues se suponía que los chicos vendrían a comer a casa.
No he recibido noticias de ellos. ¿Han llamado a Paola?- Le dije a Taylor aprovechando que Paola había ido a pagar a la barra. Esperaba disimular lo suficiente.
No, no la ha llamado nadie. Quizás les haya surgido un compromiso, y por eso le dejaron el regalo esta mañana ¿no?- Dijo Taylor.
Sí, quizás.- Estaba luchando conmigo misma para no reirme.

Cuando Paola llegó a la mesa, guardamos silencio, le sonreimos y nos dirgimos al restaurante de comida Mexicana.
Estuvimos en el restaurante hasta las cuatro de la tarde más o menos. Cuando salimos, decidimos entrar en una de las preciosas cabinas rojas y llamar a nuestros padres.
Estuvimos hablando con ellos mucho tiempo. Pero... ellos casi no podían creer todo lo que les contamos, les parecía increíble toda aquella historia.

¿Sabéis qué me apetece?- Preguntó Paola.
¿Qué?- Le preguntamos Taylor y yo al unísono.
Quiero gastarme mucho dinero en ropa, zapatos.... ¿vamos?- Nos dijo sonriente.
Está claro- Le dijo Taylor.
Yo también quiero pero.... también me apetece llevar las fotos de anoche a imprimir. Me gustaría llenar un albúm de fotos precioso de este verano, aunque hoy haga frío.- Dije.
Sí, yo también quiero.- Confirmó Paola.
Así, las tres, sonrientes nos paseamos por media cuidad, buscando tiendas, cafeterías, haciendo más fotos.... Teníamos tantas y tantas bolsas que hasta nos costaba andar. Parecíamos estar en una película. Era fascinante. Las tres notábamos cómo nos miraba la gente, pero no nos importaba, porque estábamos felices.
Cuando miramos el reloj, eran las nueve menos cuarto de la noche. Decidimos coger el metro para regresar a casa. En ese momento me acordé, y como si de telepatía se tratara, mi móvil sonó. Me retiré un poco de Paola y Taylor.

¿Sí?- Pregunté.
Hola, íbamos a prepararlo todo, pero.... cuando lleguéis lo verán ¿no?- Preguntó Niall.
Sí, es cierto, justo ahora mismo lo estaba pensando ¿que hacemos?- Le dije.
Nada, déjalo en nuestras manos.- Dijo Liam. Entonces supuse que tenían el manos libre puesto.
Nosotras vamos a coger ahora el metro, así que en diez minutos estaremos ahí. Intentad esconderos, si es que estáis cerca de casa.-Les dije.- Muchas gracias por todo, de verdad.- Me despedí.

Lo dicho, en diez minutos estábamos en casa. Corrimos por todo el jardín, entramos en casa y soltamos todas las bolsas sobre la cama.
Estábamos felices, pero aún quedaba mucha noche por delante, pero yo era la única que creía saber lo que iba a ocurrir. Nada está asegurado, a veces, las cosas no son lo que parecen.


*CONTINUARÁ.... ¿NI SIQUIERA DARCY PODÍA ESTAR SEGURA DE SABERLO TODO?*

SI LO HAS LEÍDO, POR FAVOR, DA RT A ESTO. GRACIAS. CLICK

No hay comentarios:

Publicar un comentario