sábado, 29 de septiembre de 2012

CAPÍTULO 9: ALUVIÓN DE EMOCIONES

Hola, aquí les dejo el capítulo 9. Espero que lo disfruten. Es un capítulo lleno de emociones, sentimientos, sonrisas, miradas.... Bueno, no me entretengo más, sólo les diré que comenten.



''Esto es cierto, tiene que serlo, no puedo soñar cosas tan reales. Esto es cierto''. Mi mente no podía dejar de repetir estas palabras. No me detuve hasta que no estaba a escasos dos centímetros de él, de su mirada, de su sonrisa... . Estaba delante de esa maravillosa persona, y no me pude contener, fue algo imnato, un acto reflejo, una ola de sentimientos y emociones que acabaron en esa descontrolada acción. Di un salto y me agarré a él rodeé su cintura con mis piernas y su cuello con mis brazos. Apoyé mi cabeza en su hombro derecho. Es cierto que noté cómo ambos temimos caer al suelo, pero aún así, no le solté. Noté cómo mi sonrisa era cada vez mayor, cómo mis ojos se empañaban. Un segundo después, pude sentir la humedad de mis mejillas, si estaba llorando. No podía contener lo que sentía. Pero tampoco sabía expresarlo, ni siquiera podía creerlo. Después de unos maravillosos segundos, le solté. Y ahora sus maravillosos ojos estaban posados sobre mí.

Hola.- Dijo un poco desconcertado.
Hola... em .... No quería molestarte, lo siento. Pero creo que ha sido un acto reflejo. En serio, de verdad, lo seinto mucho.- Me disculpé y dos segundos después comencé a llorar silenciosamente, no quería hacerlo, pero no lo pude evitar. Tapé mi rostro con mis manos aún temblorosas.
No te preocupes. Pero... ¿cómo has entrado aquí?- Me dijo.
Verás... yo.....- No podía hablar. Entonces él, que me vio demasiado nerviosa, apartó mis manos de mi rostro, me secó una lágrima y levantó levemente mi barbilla, orientando mi cara hacia la suya. Seguidamente, besó mi mejilla y me abrazó. Fue un beso tierno, y un abrazo cálido, casi irreal. En eso momento, mi corazón no sabía si pararse o acelerarse hasta explotar.

¡Eh!- Gritó Harry desde el otro exremo del pasillo.-No es justo, yo la he conocido primero.- Bromeó. Al oír aquellas palabras no pude evitar sonreir.

Cuando llegamos al lado de Taylor, Paola y Harry me separé de Zayn. No lo podía creer, estaba abrazada a Zayn. Él, que era capaz de acelerar mi corazón en cuestión de segundos con una sola mirada, me estaba abrazando para calmar mis nervios.

Esta es Taylor.- Dijo señalando a mi amiga.- Y esta es Paola.- Dijo señalando esta vez a mi otra amiga.
Ah, encantado- Dijo Zayn al tiempo que se acercaba a ellas para darles dos besos.- Nunca os había visto por aquí.
Ejem....-Hizo como que se aclaraba la gargante Taylor.-Ni nosotras a ti, desgraciadamente.Casi ni me creo que te esté viendo ahora.- Continuó Taylor.
¿Taylor y Paola estaban en la puerta acompañando a....?- Dijo dudoso dirigiendo su linda mirada hacia mí.
Ah, soy Darcy, siento no haberme presentado.- Expliqué.
No, no estaban en la puerta.-Dijo Harry.
Ah, ¿entonces ustedes tres no se conocen?- Dijo un poco desconcertado. En el fondo me sentía mal, porque creo que estaba desconcertado por mi culpa, por mi actuación estelar. Me sentía mal, porque le había dado un pequeño ''susto''.
Sí, son amigas entre ellas. Y desde anoche, son amigas mías.-Explicó Harry.
Ah, debido a la emoción  por parte de Darcy pensé que era una fan que estaba en la puerta.-Dijo Zayn.
Sí, nos conocemos desde hace poco tiempo, pero me apetecía pasar el día con ellas. Así que he venido a presentarlas.- Explicó Harry.
Sí, hace poco que nos conocemos, pero para mí es una larga historia.- Intervino Paola sonriente.

Y así estuvimos un rato, entre risas, miradas y bromas. La verdad es que con Harry me sentía en condiciones para vacilarle, pero con Zayn todo era distinto. Su mirada me dejaba petrificada. Sólo podía pensar en ''gracias y lo siento''. Mi boca mostraba la sonrisa mayor dibujada jamás en mi cara, y mis ojos brillaban.
Pocos minutos depués estábamos entrando en aquella sala. Sólo pensé: ''contrólate, ya la has liado bastante''. Pero no podía ocultar mi felicidad, estaba sonriente a más no poder. Cuando vi a las personas que había en el interior de aquella sala no pude evitar sonreír, y Taylor y Paola hicieron lo mismo. Sí, allí estab Niall, Liam y Louis.

Hola.- Intervino Paola para sorpresa de Taylor y mía. Era raro que ella tomara la iniciativa de hablar, pero... Taylor y yo sonreímos felices de que por dos segundos dejara su timidez a un lado.

Zayn y Harry sonrieron, y luego saludaron a sus amigos.

Estas chicas son amigas mías.- Explicó Harry.- Bueno.... y de Niall.-Rectificó al ver que Niall le estaba mirando con una mirada directa, demasiado quizás. Esa pequeña broma, ese cruce de miradas me hizo reír, y a Taylor y Paola también se les escapó una sonrisilla.
Hola.-Saludó Liam bajo nuestra atenta mirada, al tiempo que soltaba los auriculares, y se digiría a nosotras para saludarnos con dos besos. Aún estábamos un poco desconcertadas, pero al mismo tiempo eso se nos hacía familiar.
¡Hola!- Exclamó Louis elevando la voz más de lo normal, y era porque aún tenía los cascos puestos. Pero dos segundos después, se percató de ello, se los quitó y se acercó a saludarnos también con dos besos.

Hola, ¿Qué tal? ¿Os ha traido Harry?- Preguntó Niall.
Sí, ha ido a ''sorprendernos'' esta mañana a nuestra casa.- Expliqué sonriente.
Sí, y ¿sabéis qué?- Dijo Harry poniendo una voz aún más misteriosa y acercándose cada vez más a sus amigos.- Me han dicho que somos sus prícipes, pero que podríamos ser sus reyes.- Dijo sonriendo, casi en un susurro.
Jajaja, ¡qué bonito! Pero... los príncipes no son nada sin sus princesas.- Dijo Niall dulcemente. Sí, en ese momento nosotras tres nos sentimos como verdaderas princesas, y aquellasala nos parecía el mejor palacio del mundo.
¿Estás inisnuando que podríamos llegar a ser unas princesas?- Preguntó Taylor, y noté cómo Paola le daba un codazo.
¡Quién sabe!- Exclamó Louis.
Un momento... Es que hay algo que no entiendo. Creo que me he perdido en medio de esta dulce y loca conversación.- Intervino Zayn.
Verás siento mucho lo sucedido en el pasillo. No quería que pensaras que estoy loca, lo siento.-Comencé a hablar.- La historia es un poco larga, pero la resumiré un poco ¿vale?- Hice una pequeña pausa, cogí aire y continué. Le expliqué lo sucedido la noche anterior con Harry, con Niall, la visita inesperada de Harry.... Y al finalizar la explicación, él asintió.
Ah, vale, ahora ya me ha quedado todo más claro. Entonces, os saludaré de nuevo.- Y se acercó sonriente a nosotras, nos dio dos besos a cada una y nos dedicó una sonrisa. En ese momento, pude percibir de nuevo su perfume, el suave tacto de su piel, la dulzura de su sonrisa, la intensidad de su mirada. Sí, mientras me daba los dos besos, cerré los ojos temiendo de nuevo que todo fuera un sueño y que se esfuera con un solo pestañeo.

Estuvimos allí sentadas un rato, viendo cómo trabajaban. Nosotras estábamos tan felices que hasta nos dolían las mejilas de sonreír. Eran ellos mismos, naturales, al igual que aparecen en sus vídeos. No parecía molestarles nuestra presencia. Incluso nos gastaron bromas, nos reímos.... Era un momento único e irrepetible. Era agradable, pero a la misma vez doloroso, porque ...¿y si no les volvíamos a ver?. Prefería borrar esos pensamientos de mi cabeza y disfrutar del momento.

Tengo hambre, ¿y ustedes?- Preguntó Niall.
Sí, yo un poco.- Respondí.
Bueno, pues vayamos a comer a algún sitio.- Dijo Liam.
¿Adónde?- Preguntó Harry.
A cualquier sitio donde haya comida.- Dijo de nuevo Niall.

Y así, pocos minutos después, estábamos en la puerta del edificio. Como era evidente, no cabíamos todos en un mismo coche, así que en pocos segundos decidimos. Harry, Zayn, Liam y yo iríamos en el coche de Harry; y Niall, Louis, Taylor y Paola, irían en el coche de Louis.
Entre ellos bromearon y se dijeron los unos a los otros que cuidaran bien de nosotras.
A los pocos minutos estábamos en la puerta de aquel sitio.

Quizás no os parezca un sitio muy especial, pero hay unas hamburguesas realmente buenas.- Explicó Niall.
Es cierto, las hamburguesas son deliciosas, y los postres son para chuparse los dedos.- Afirmé yo casi babeando.

Así, entramos en aquel Mcdonald's. Era amplio. No había mucha gente, y sólo unos pocos parecían sorprenderse de nuestra presencia, o más bien de nuestra compañía. Entonces pensé que ellos estarían acostumbrados  a verles cada día.

Yo quiero una hamburguesa doble.- Dijo Louis.
Sí, yo también, con patatas y de beber una botella de agua.- Dije yo. Tenía hambre, pero en un principio no sabía si pedir lo que me apetecía o no.

Al final, todos acabamos comiendo lo mismo, pero unos bebbimso agua, otros Coca-cola y otros fanta.
Estábamos sentados al final del local, en unos asientos rojos. La verdad, eran cómodos, pero me hubiera dado igual estar sentada encima de un cactus, con tal de estar en esa maravillosa compañía. La situación era maravillosa.
Comenzamos a hablar de cosas normales, del presente, del futuro, de la vida, de todo en general. E incluso hicimos alguna que otra porquería con algunos trozos de comida. No dejamos de reír y bromear ni un momento.
Eso sí, los chicos no permitieron que nosotras pagáramos nada. E incluso ellos pagaron los postres. Cada uno nos pedimos un helado tamaño XXL. Fue un almuerzo realmente bueno, y no sólo por la comida, era todo, la compañía, el lugar, las emociones... .

Al salir, comencé a notar de nuevo cómo mi cuerpo se sentía cada vez más flojo, como flotando en una nube. Esta experimentado de nuevo esa sensación que me hacía pensar que todo, absolutamente todo era incierto, tanto como una pompa de jabón. Esa pompa que depende de la intesidad con la que soples, no se crea, o por el contrario explota ante ti y te salpica la cara de jabón.

Al salir del local, todos nos miramos ansiosos pero relajados, sonrientes, pero nerviosos. Eran sentimientos encontrados, sin fundamente aparentes.
De nuevo, subimos a los coches y ellos condujeron hacia un lugar cualquiera, un sitio desconocido para mí y mis amigas, ya que cualquier rincón de aquella ciudad era nuevo para nosotras.
Entonces, aproveché la ausencia de Taylor y Paola para decirles a Zayn, Harry y Liam una cosa. Pero de nuevo, los nervios me invadían. Comencé a balbucear palabras casi sin sentido.

Verás, después de disculparme de nuevo...- Cogí aire.- Mq gustaría... deciros una cosa. Pero no quiero.... bueno... verás.- Suspiré con nerviosismo.- Es que estoy muy nerviosa. Harry estaba conduciendo, pero frenó. Giró la cabeza y me miró, luego miró a sus amigos, y sonriente, pronunció unas palabras que me hicieron sonreír.

Chicos, está nerviosa, esta mañana a mí me pasó lo mismo. Quiere decirnos algo, pero hasta que no pase un rato y nosotros estemos llenos de intriga no hablará.-Continuó sonriendo.- Pero no la culpéis, son los nervios que la invaden. Esta mañana casi sufre un infarto sólo por miedo a que le dijera que no quería felicitar mañana a su amiga por su cumpleaños

Sí, ahora me sentía más nerviosa, o quizás más relajada. Quería decirlo, pero sentía miedo ¿estaba en lo correcto?....



*CONTINUARÁ....*

No hay comentarios:

Publicar un comentario